Una rica tortilla sin huevo, sana porque la papa no está frita y muy rica. Con estas cantidades me salió una tortilla para dos personas
INGREDIENTES
· Aceite de oliva virgen extra
· 400 gramos de patatas
· 1/2 cebolla
· 8 cucharadas de harina de
garbanzo (rasas)
· 8 cucharadas de agua + 1 taza de
agua ó 250 mililitros (si vais a hacer la versión ligera)
· Sal al gusto
INSTRUCCIONES
1. Pelamos las papas, las lavamos,
las partimos por la mitad y las troceamos en láminas finas. Cortamos la cebolla
en trocitos muy pequeños.
2. En una sartén echamos una o dos
cucharadas de aceite y cuando esté caliente echamos las patatas y la cebolla,
añadimos sal al gusto, 250 mililitros de agua (o una taza) y subimos el fuego
al máximo. Cuando el agua esté hirviendo, bajamos el fuego (yo lo pongo al 6) y
cubrimos la sartén con una tapa. Dejamos las patatas hasta que estén hechas, a
nosotros nos tardaron unos 20 minutos. Removemos de vez en cuando para que no
se peguen a la sartén. A nosotros se nos consume toda el agua, pero si os
gustan menos hechas, podéis colarlas y si os gustan más hechas, añadir más y
dejarlas más tiempo.
3. En un bol añadimos las 8 cucharadas de harina y de agua, batimos hasta obtener una mezcla homogénea,
añadimos un poquito de sal y las patatas y la cebolla cocinadas. Removemos.
4. En una sartén echamos una o dos
cucharadas de aceite y cuando esté caliente echamos la mezcla anterior y
dejamos que se vaya cuajando a fuego medio (de nuevo lo ponemos al 6) durante
unos 5 minutos. Colocamos un plato sobre la tortilla y le damos la vuelta para
que se cocine por el otro lado durante otros 5 minutos. Le damos las vueltas
que sean necesarias para que la tortilla esté hecha por dentro y por fuera.
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